13 de diciembre de 2004
La bicicleta
La bicicleta es una nueva era en China. No es lo mismo vivir entre las paredes de las cuatro calles que puedes recorrer a pie en Beijin y las muchas que recorres en autobús que las que vives si tienes una bicicleta. Se abre un horizonte de templos, canales, callejones antiguos de la China que se desvanece entre los edificios, el tiempo te rinde más adquiere una dimensión de vida y alegría pesar del frío de invierno que rompe en tu rostro y cala los huesos de las manos si has dejado los guantes olvidados en una lavabo. Beijin brilla más con una bicicleta.
Las puedes encontrar de todo tipo, hay pesadas, con casnastilla de acero, de mimbre, de pático, las hay modernas con ruedas pequeñisimas, las encuentras ligeras, de montaña y otras más antiguas, pesadas, las encuentras de doble uso y nuevas, tu escoges, pero como escoger en China sin saber chino es difícil, confias en alguien y a fin después de tantos meses de dudar, porqeu una nueva te la roban y una vieja no sabes si está bien, y no logras comunicarte con tu marchante bicicletero, un día te decides y vas a la tienda y te compras una y por fin, eres feliz, feliz porque eres libre, porque el viento se rompe en tu rostro, porque tienes más tiempo, más energía porque la vida cambia en China con una bicleta.
La bicicleta es una nueva era en China. No es lo mismo vivir entre las paredes de las cuatro calles que puedes recorrer a pie en Beijin y las muchas que recorres en autobús que las que vives si tienes una bicicleta. Se abre un horizonte de templos, canales, callejones antiguos de la China que se desvanece entre los edificios, el tiempo te rinde más adquiere una dimensión de vida y alegría pesar del frío de invierno que rompe en tu rostro y cala los huesos de las manos si has dejado los guantes olvidados en una lavabo. Beijin brilla más con una bicicleta.
Las puedes encontrar de todo tipo, hay pesadas, con casnastilla de acero, de mimbre, de pático, las hay modernas con ruedas pequeñisimas, las encuentras ligeras, de montaña y otras más antiguas, pesadas, las encuentras de doble uso y nuevas, tu escoges, pero como escoger en China sin saber chino es difícil, confias en alguien y a fin después de tantos meses de dudar, porqeu una nueva te la roban y una vieja no sabes si está bien, y no logras comunicarte con tu marchante bicicletero, un día te decides y vas a la tienda y te compras una y por fin, eres feliz, feliz porque eres libre, porque el viento se rompe en tu rostro, porque tienes más tiempo, más energía porque la vida cambia en China con una bicleta.
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